Pasión por la voluntad

Muchas son las historias que se cuentan dentro de un evento deportivo internacional, pero detrás de todo el protocolo, de la seriedad y de las camisetas impecables, se cuentan historias de personas que quieren que el evento sea perfecto y que los invitados se sientan en la ciudad como en sus casas.

Ésta es la historia de uno de los 200 voluntarios que se pone la camiseta azul oscura todos los días y viene a la Unidad Deportiva Atanasio Girardot a cumplir con sus labores como acompañante de la delegación de Argentina.

Su nombre es Vicente Mejía, nació hace 72 años en San Antonio, Texas, y en vive hace 7 años, donde ha participado en varios eventos deportivos, como voluntario por pasión al deporte y a ayudar a la gente.

“Yo siempre he sido voluntario, desde que tenía 16 años he ayudado en varios eventos y ahora pertenezco a un grupo de voluntarios maravilloso llamado Apasionados por Medellín, en el que me doy cuenta de los certámenes para poder participar de éstos”, manifiesta Vicente con el rostro rozagante.

Vicente se muestra muy dispuesto a continuar siendo voluntario, pues es algo que lo apasiona y por lo cual vibra. Por ahora, al igual que todos, se despide de la edición número 22 de los Juegos Sudamericanos Escolares, un evento que ha dejado muchas alegrías sudamericanas y grandes conocimientos.